miércoles, 20 de abril de 2011

Lo que anhelo.


Caminaba hacia mi, firme y segura, con una sonrisa extraña en la cara. Yo, atemorizado retrocedí descalzo y recién levantado por mi habitación. Tropecé con una mesita, y luego con mis zapatos. Extendió un brazo hacia mi, muy segura de lo que hacia.

-Tomad, esto es vuestro…-La mujer quedo clavada en el lugar, mientras que yo seguía retrocediendo sin más.

-¿Q-que es?-Mire el objeto, sin reconocerlo.

-¿Esto?-Lo puso en alto, a mejor vista, expuesto a los rallos de el sol que entraban por la ventana.

Parecía un frasco pequeño, con un tapón plateado y una correa de cuero.

-¿Qué contiene?-Mire el liquido con burbujas del frasco.

-Veras, esto es lo que anhelaras dentro de un tiempo si no lo coges, lo que necesitaras dentro de poco, es vida, es poder… Lo es todo.

-¿Cómo puede caber todo en un pequeño frasco?-Parecía mentira que el miedo se hubiera vuelto intriga.

-¿Cómo puede todo, caber en un cuerpo?-Digo a la par que me miraba de abajo arriba.

Camine hacia ella temeroso de lo que me podría hacer agarrando entre mis manos aquel objeto.

-Ansiaras todo lo que te he nombrado, incluso ansiaras otros cuerpos.

Aquella mujer me daba miedo, tras de mi, paso su dedo índice por mi cuello provocándome un escalofrío. Paso ambos brazos por cada lado de mi, y cogiendo de mis manos aquello, lo colgó en mi cuello.

-No te lo quites, no lo muestres en publico, si lo rompes, mueres, si lo pierdes, desapareces.

No entendía lo que me quería decir. No, no lo podía entender. Tenia quince años, ¿Qué podía entender? Ni siquiera ahora, tras diez años, clavado en la edad de veinte, he podido comprender mas de la mitad de aquellas palabras que me digo la mujer. Tocaba el colgante en mi cuello, dándole vueltas al frasco de un lado a otro, cuando llamaron a la puerta de mi habitación.

-Hijo, te están esperando.-Dijo la mujer que ilusionada, me tomaba por su descendiente.

-Claro, ahora voy.-Me levante del borde de la ventana a la par que cogía mi chaqueta.

De momento, lo poco que sabia, era que todo había comenzado en ese momento, y que ahora, me mantenía con vida, fuera de miradas, y me mandaba aquello que anhelaba. 
Todo. 
Todo lo que cabía en un cuerpo.
Sangre.





















Madame.B

1 comentario:

  1. Me ha gustado *.* Te ha quedado bien la actu. Muy bien diría yo jaja
    Por cierto, me gusta el cambio que le has dado al blog.

    En fin petarda, a ver si hablamos algún día o algo, que entre unas cosas y otras, apenas hablamos por msn xD

    TQQQQQQQQQQ

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Creyeron que podían usarme y tirarme. Intentaron hacerme pequeña. Sufrí muchas humillaciones, pero ahora estoy por encima de todo. Sí, el precio que pagué fue toda mi mida, pero al fin hallé una salida. Y si de lo malo puede salir algo bueno, el pasado descansa en paz. "Marilyn monroe"